- Población total de la especie aumentó en el país durante las últimas tres décadas.
- La tala del Almendro de Montaña mantiene en riesgo a la Lapa Verde.
El Programa de la Lapa Verde que salvó a la especie en Costa Rica cumple su 30 aniversario este 2024 y advierte de nuevos retos para la especie debido al peligro que corre su hábitat predilecto: el Almendro de Montaña.
Este programa es dirigido por el Centro Científico Tropical (CCT) y, junto a aliados institucionales, comunitarios y 
de otras organizaciones, han logrado registrar un aumento poblacional de la lapa verde (Ara ambiguus) de alrededor de 200 individuos en 1994 a un mínimo de 500 individuos de acuerdo con conteos anuales realizados entre el 2019 y el 2022.
En la actualidad, la mayor amenaza para la lapa verde es la tala del Almendro de Montaña (Dipteryx panamensis). Almendros centenarios y de gran tamaño sirven de nido para la Lapa Verde, también sus semillas componen el 80% de su alimento durante la temporada de reproducción. Los frutos que caen al suelo también sirven de alimento para otras 60 especies entre aves y mamíferos.
En Costa Rica se ha perdido gran extensión de bosque de Almendro de Montaña, las poblaciones de este árbol han disminuido alarmantemente de ser una especie abundante en la zona norte y caribe del país a encontrar solamente un Almendro por hectárea. Es por eso por lo que el Programa de la Lapa Verde apuesta a la restauración ecológica, a la promoción de la agroforestería y a generar valor agregado en productos derivados de la nuez del almendro.
Para Alexander González, Jefe del Programa de Investigación y Conservación de la Lapa Verde del Centro Científico Tropical “gracias al esfuerzo conjunto de la sociedad costarricense, hemos logrado salvar a la Lapa Verde de la extinción en nuestro país. Sin embargo, este símbolo de nuestra biodiversidad y de sus ecosistemas se encuentra amenazado. El ecoturismo, la agroforestería y alternativas innovadoras como el uso sostenible de la nuez de almendro representan oportunidades económicas mientras protegemos y recuperamos nuestra biodiversidad.”
Gracias a nuestros esfuerzos y el apoyo de nuestros aliados entre 2023 y 2024 el Programa sembrará unos 40.000 árboles de Almendro de Montaña y otras especies de importancia para la conservación de la biodiversidad en esta región.
La lapa verde ó Ara ambiguus por su nombre científico mide alrededor de 84 centímetros en su etapa adulta, forman parejas para toda la vida y suelen mantener el mismo nido. Cuidan de sus crías hasta que puedan valerse por sí mismas. A pesar de estar distribuidas por la mayoría del Caribe y Zona Norte costarricense sigue siendo difícil de observar debido a la escasez del almendro.
Mirada histórica al Programa de la Lapa Verde
En 1994 el investigador del Centro Científico Tropical, George Powell, se pregunta por qué la Lapa Verde dejó de llegar al bosque en Monteverde e inicia una investigación al respecto en el cantón de Sarapiquí. En ese momento habían poco más de 200 individuos en Costa Rica.
Las principales acciones que contribuyeron a salvar de la extinción a la lapa verde en Costa Rica fueron la promulgación de dos Decretos Ejecutivos: uno que declaró el robo de pichones de la especie un delito, y otro que estableció una veda al corte del Almendro de Montaña.
A lo anterior se le sumó una fuerte presencia de proyectos de educación ambiental en Sarapiquí; el impulso del ecoturismo; la creación del Corredor Biológico San Juan la Selva en 2001; y posteriormente del Refugio de Vida Silvestre Mixto Maquenque.
